Guía: cómo afilar un cuchillo en casa

¿Hay algo peor que intentar usar tu cuchillo EDC, de supervivencia o de caza solo para darte cuenta de que está mucho más desafilado de lo que recordabas? Si usas el cuchillo con frecuencia, esto eventualmente sucederá. Lo bueno es que puedes evitarlo aprendiendo a afilar un cuchillo en casa. Aunque al principio no sepas cómo hacerlo perfectamente, no debería tomarte mucho aprender con esta guía.
Paso 1: Consigue una piedra para afilar
Tienes muchas opciones para afilar un cuchillo en casa. Puedes usar desde un afilador oficial hasta papel de lija y un viejo mousepad. Pero lo más recomendable es usar una piedra para afilar, pues suele producir los mejores resultados.
Paso 2: Sumérge la piedra en agua
Antes de usar la piedra, debes remojarla en agua. Esto permite que la piedra elimine mejor las virutas de metal mientras afilas. También es útil mantener un recipiente con agua a mano para ir humedeciendo la piedra según sea necesario. Enjuaga la piedra ocasionalmente para que no se seque.
Paso 3: Usa un marcador permanente para colorear el bisel
A veces no es fácil ver el bisel de la hoja cuando estás afilando. Colorearlo con un marcador permanente te ayuda a visualizar el filo y evitar que afiles demasiado (o muy poco).
Paso 4: busca el ángulo correcto para afilar la hoja
Este paso es clave: encontrar y mantener un ángulo constante al afilar. Si no lo haces, es posible que no afiles bien la hoja o incluso la dañes. Practica este paso con un cuchillo viejo hasta sentirte cómodo con el método.
Cómo encontrar el ángulo adecuado:
- Sostén el cuchillo por el mango, con el filo hacia ti, y apóyalo sobre la piedra.
- Usa la otra mano para apoyar los dedos de la hoja sobre la piedra.
- Levanta la espalda de la hoja hasta formar un ángulo de aproximadamente 20 grados.
- Desliza la hoja sobre la piedra lentamente.
- Observa cómo se borra el marcador; ajusta el ángulo para que todo el filo pase sobre la piedra de manera uniforme.
Paso 5: Levanta una rebaba en cada lado de la hoja
Una vez que has encontrado el ángulo correcto, mueve la hoja hacia adelante y hacia atrás sobre la piedra hasta que formes una rebaba. La rebaba es un pequeño borde de metal que se levanta en el lado opuesto al estar afilando.
Sabrás que es momento de invertir la hoja cuando la rebaba cubra toda la longitud del filo.

Paso 6: Refina la hoja para terminar de afilar
Después de levantar rebaba en ambos lados de la hoja, afina aún más haciendo de 10 a 20 pasadas adicionales por cada lado.
Paso 7: Prueba la nitidez de la hoja
El paso final es probar el filo. Usa el cuchillo para cortar un papel. Si el corte es limpio y suave, la hoja está bien afilada.
Saber afilar correctamente importa
Afilar una hoja en casa puede ser un proceso de prueba y error al principio. Si no lo haces bien las primeras veces, sigue intentándolo hasta lograr buenos resultados.